La Casa do Deán: Donde el Barroco se Encuentra con el Camino.
La Casa do Deán: Donde el Barroco se Encuentra con el Camino.
¿La Verdadera Meta? Descubre la joya barroca que custodia la Plaza de Praterías. De residencia de élite a Oficina del Peregrino: el lugar donde el Camino se sella.
¿Qué es la Casa do Deán?
Al llegar a la histórica Plaza de Praterías, la visión del turista se suele centrar en la fachada sur de la Catedral. Sin embargo, en la esquina más vibrante de la plaza, se alza un edificio cuya relevancia histórica y actual es imposible de ignorar: la Casa do Deán.
Este no es un edificio más en el entramado de piedra de Compostela. Es una de las joyas más refinadas y significativas del urbanismo histórico. Ubicada estratégicamente en la unión de la Rúa do Vilar y la Rúa Xelmírez, la Casa do Deán funciona como una monumental "puerta barroca" que da acceso directo a la plaza.
Catalogada como Edificación Monumental Nivel 1, esta casa palacio es una pieza clave para entender el desarrollo arquitectónico de la ciudad. Antiguamente fue la residencia oficial del Deán (presidente del Cabildo de la Catedral), donde se recibía a personalidades ilustres que visitaban Santiago.
En la actualidad, ha reabierto sus puertas con un propósito que la liga inquebrantablemente al Camino de Santiago: ser la Oficina de Atención al Peregrino (OAP). Tras siglos de historia, la Casa do Deán se ha convertido en la meta tangible donde miles de caminantes recogen la Compostela, el certificado que acredita su peregrinación, sellando así su viaje de fe en este imponente marco barroco.
Historia y Arquitectura
La Casa do Deán no es solo un testigo del tiempo, es una declaración de estilo. Se la considera, con razón, el palacio urbano compostelano más emblemático del Barroco Gallego, condensando en su fachada la riqueza ornamental y la maestría constructiva del siglo XVIII.
Su origen se remonta a la necesidad de construir una residencia digna para el Deán (la máxima autoridad después del Arzobispo) y para acoger a las personalidades que visitaban Santiago, elevando el estatus de la ciudad como centro de peregrinación y poder eclesiástico.
Una Obra de Autor con Sello Gallego:
El diseño y la ejecución de este palacio resultaron de una colaboración magistral:
- Diego Juan de Ulloa: El canónigo fue el visionario y promotor de la obra.
- Clemente Fernández Sarela: El arquitecto, una figura cumbre del barroco compostelano, fue el encargado de plasmar esta visión en piedra. Sarela fue responsable de algunas de las fachadas más bellas y emblemáticas de la ciudad.
El resultado es un edificio que se integra perfectamente con su entorno, mostrando la característica piedra gallega y el trabajo del cantero en todo su esplendor. Al contemplar sus volúmenes y su ornamentación, el visitante entiende por qué la Casa do Deán está considerada una obra maestra, representando la opulencia y el carácter monumental que definió la vida en el Santiago del siglo XVIII.
Su diseño robusto, pero a la vez elegante, ha permitido que este palacio haya perdurado hasta nuestros días, manteniendo intacta la esencia de una época dorada de la arquitectura en Galicia.
El Nuevo Papel para el Peregrino
Tras siglos sirviendo como sede de la alta jerarquía eclesiástica de Santiago, la Casa do Deán ha asumido en el siglo XXI su papel más noble y universal: el de puerta de bienvenida y certificación para los peregrinos del Camino de Santiago.
Desde su reciente rehabilitación, esta joya barroca es la sede de la Oficina de Atención al Peregrino (OAP).
Para el caminante, la Casa do Deán representa el destino final de un viaje que, en ocasiones, dura meses. Es aquí donde la fatiga se transforma en alegría, y donde la credencial llena de sellos se intercambia por el tesoro más preciado: La Compostela.
La Meta Espiritual: Al entrar en el edificio, el peregrino no solo accede a una oficina; accede a un espacio cargado de historia que ha sido adaptado magistralmente para honrar su esfuerzo. Es el lugar donde, de forma oficial, el viaje termina y la experiencia se sella.
La afluencia de miles de peregrinos, especialmente en Año Santo, pone de manifiesto la necesidad de un espacio de acogida de esta envergadura. El documento técnico adjunto refleja precisamente el desafío de adaptar un edificio patrimonial del siglo XVIII a una función moderna que exige gestionar a grandes grupos de personas. Sin embargo, el resultado es impecable: la Casa do Deán honra la tradición al ofrecer un remanso de paz y un final digno a la experiencia de la peregrinación.
Es, sin duda, el último hito, y quizás el más emotivo, que todo peregrino debe cruzar en Santiago de Compostela.
El Remanso de Paz en la Ciudad de Piedra
Mientras la Rúa do Vilar y la Plaza de Praterías bullen con el ir y venir de turistas y peregrinos, la Casa do Deán esconde en su interior un pequeño oasis, un auténtico tesoro que a menudo pasa inadvertido: el Patio de la Parra.
Este patio interior es un remanso verde en el bosque de piedra de Compostela, un espacio concebido durante la rehabilitación para ofrecer consuelo y descanso a quienes esperan su turno en la Oficina de Atención al Peregrino. Es un lugar donde el tiempo parece ralentizarse, permitiendo al caminante reflexionar sobre el viaje concluido.
Un Símbolo Vivo:
El nombre del patio procede de la parra (vid) que lo preside, un elemento vegetal que no solo proporciona sombra en verano, sino que también funciona como un símbolo vivo:
- Representa la experiencia del tiempo y las estaciones en contraste con la inmutabilidad de la piedra de granito.
- Es un testigo de la historia, una presencia orgánica y acogedora que humaniza la imponente arquitectura.
Además de la vegetación, el patio ofrece una experiencia sensorial única a través del sonido del agua. Gracias a la restauración, una gárgola de zinc vierte agua sobre un pequeño estanque cuando llueve, llenando el espacio sonoro de una melodía sutil y natural, un bálsamo para los oídos del peregrino.
El Patio de la Parra es, en esencia, la última gran bienvenida de Santiago: un espacio de intimidad y reflexión antes de recibir la ansiada Compostela.
La transformación de la Casa do Deán para acoger la Oficina de Atención al Peregrino no fue una simple reforma, sino una profunda y respetuosa restauración patrimonial llevada a cabo por la Oficina Técnica del Consorcio de Santiago. Este trabajo ejemplar garantiza que el palacio pueda servir a su nueva función sin perder un ápice de su carácter histórico.
El proyecto se guió por una filosofía clara: la recuperación y reutilización de materiales y técnicas tradicionales, logrando una fusión perfecta entre la historia del edificio y las necesidades contemporáneas.
Conservación y Tradición Artesanal
- Vigas de Castaño: Se priorizó el uso de madera de castaño en las vigas, un material tradicional gallego, asegurando la durabilidad y la autenticidad estructural del edificio.
- Reutilización del Granito: En un gesto de respeto al pasado y sostenibilidad, se reutilizaron losas de granito para los pavimentos, honrando la estética pétrea de Compostela.
- La Estanqueidad de Barco: Uno de los detalles más curiosos es la técnica empleada para sellar las bóvedas y garantizar la estanqueidad de la terraza superior: se utilizó estopa y brea. Este es un método tradicionalmente usado por especialistas en reparación de barcos, aplicado aquí para proteger la estructura del palacio de la omnipresente lluvia gallega.
Diseño y Funcionalidad Innovadora
Además de la conservación, la intervención introdujo elementos de diseño innovador:
- Carpinterías Distintivas: Para las carpinterías exteriores se eligió madera de cedro canadiense, pintada con el pigmento tradicional "rojo Falun". Este color no solo es duradero, sino que añade un toque de contraste visual y calidez a la piedra gris.
- La Escalera Escultórica: En la zona de la OAP, destaca una escalera cuya base parece emerger directamente del enlosado de granito, creando un efecto visual potente y moderno que simboliza cómo la nueva vida del edificio nace de su antigua estructura de piedra.
La rehabilitación de la Casa do Deán es, en sí misma, una obra de arte que asegura que esta joya barroca perdure, no solo como un museo de su pasado, sino como un vibrante y funcional centro neurálgico para el Santiago del futuro.
Preguntas frecuentes sobre la Casa do Deán
¿Buscas la Compostela? Resolvemos tus dudas esenciales sobre la Casa do Deán: desde su arquitectura Barroca Gallega hasta el proceso final de tu Camino a Santiago.
Actualmente, la Casa do Deán es la sede de la Oficina de Atención al Peregrino (OAP). Es el lugar donde los peregrinos que han finalizado su viaje recogen la Compostela, el certificado que acredita la peregrinación.
Está situada en un punto estratégico del Casco Histórico de Santiago de Compostela, justo en la esquina de la Rúa do Vilar con la Rúa Xelmírez, sirviendo de acceso monumental a la Plaza de Praterías.
Sí, aunque su uso principal es para la OAP, el edificio es un Monumento Nivel 1. El acceso al edificio y a su famoso Patio de la Parra suele ser posible y muy recomendable para apreciar su arquitectura barroca y la exquisita restauración.
Es el patio interior del edificio, un remanso de paz con vegetación. Es famoso por la parra (vid) que lo preside, simbolizando el paso del tiempo y ofreciendo un espacio de calma a los peregrinos antes de recibir su Compostela.
Fue una obra importante del siglo XVIII, diseñada por el canónigo Diego Juan de Ulloa y ejecutada por el renombrado arquitecto barroco gallego Clemente Fernández Sarela.
Originalmente, era la residencia oficial del Deán Presidente del Cabildo (la máxima autoridad después del Arzobispo) y se utilizaba como lugar de recepción para dignatarios y visitantes ilustres de la ciudad.
Se distingue por su rica ornamentación en piedra, el uso característico del granito gallego, y su diseño que combina la grandiosidad palaciega con la integración en el entramado urbano de Compostela, siendo considerado el palacio urbano barroco más destacado de la ciudad.
Sí, el proyecto fue complejo. Se tuvo que realizar una delicada labor de retirada de fibrocemento con amianto de la estructura antigua. Además, se utilizaron técnicas artesanales, como el sellado de las cubiertas con estopa y brea, un método tradicionalmente usado en barcos.
Curiosidades sobre la Casa do Deán de Santiago de Compostela
Curiosidades sobre la Casa do Deán de Santiago de Compostela
¿Sabías que el Palacio usa TÉCNICAS NAVALES? Descubre los secretos de su restauración: desde madera de barcos hasta una escalera que nace de la piedra. ¡Los detalles que no te cuentan!
La Casa do Deán es considerada el palacio urbano más emblemático del Barroco Gallego en Santiago. Esto significa que, más allá de la Catedral, este edificio era el punto culminante de la arquitectura civil de la época, diseñado para impresionar a los visitantes ilustres de la ciudad.
Para lograr una estanqueidad perfecta en las cubiertas y proteger el interior de la lluvia gallega, los restauradores recurrieron a una técnica insólita: utilizaron estopa y brea. Esta mezcla se aplica comúnmente en la reparación y sellado de barcos de madera, ¡convirtiendo la terraza de este palacio en un navío contra las tormentas!
En el proceso de rehabilitación fue necesario un trabajo especializado para la retirada de fibrocemento con amianto, un material de construcción peligroso que formaba parte de la estructura antigua. Esto subraya la complejidad de intervenir en edificios históricos para garantizar su seguridad y habitabilidad.
Las nuevas carpinterías no son de un color cualquiera. Se utilizó madera de cedro canadiense y se pintó con el distintivo "rojo Falun" (red Falun), un pigmento tradicional de origen sueco (de la mina de Falun) conocido por su durabilidad y por realzar visualmente las fachadas de madera, creando un contraste atractivo con el granito.
El Patio de la Parra tiene una gárgola de zinc sobre un pequeño estanque. Cuando llueve, el sonido del agua al caer es intencional y vital. La gárgola está diseñada para "invadir el espacio sonoro" del patio, ofreciendo un ruido ambiental relajante y natural a los peregrinos que esperan, transformando la lluvia en parte de la experiencia de bienvenida.
En el interior de la Oficina de Atención al Peregrino (OAP), una de las escaleras principales tiene un diseño impactante: parece que emerge de forma orgánica del enlosado de granito del suelo. Este detalle arquitectónico moderno simboliza cómo la nueva vida del edificio brota directamente de su fundación histórica.